Somos Romina y Héctor, nuestra historia de amor empezó hace 10 años, al año de estar de novios empezamos a buscar con ansias ese embarazo que tardaría en llegar...

Iban pasando los meses y los test de embarazo daban negativo, entonces fue cuando nos empezamos a preocupar y decidimos ver a un especialista en fertilidad... mientras nos empezamos hacer los estudios, quedé embarazada y lo perdí...

Al principio creíamos que era mi marido que tenia el problema, y luego, haciéndome un estudios descubrimos que tenia las trompas obstruidas y que teníamos que ir a un tratamiento de alta complejidad, una fertilización in vitro; empezamos el tratamiento en un hospital público y nos pusieron en lista de espera, mientras pasaban los años y fuimos esperando, tengo un embarazo ectópico y me tienen que ligar las trompas , justo cuando creíamos que iba a ser imposible lograr ese embarazo, el mismo día de la operación del embarazo ectópico, hacen realidad la Ley de Fertilización asistida y aquí empieza la mejor parte de la historia, luego de recuperarme de la operación, fui a la obra social y ellos me derivaron a GESTAR, ahí conocí a los dueños de mi felicidad, enseguida comenzamos con las inyecciones y, un día, llegó el día de la transferencia de los embriones, después, a casa tranquila a esperar el positivo... después de varios días hicimos el análisis de sangre y síiiii, dió positivo! más tarde hicimos eco y había dos sacos, latían dos corazones, estábamos embarazados de mellizos, y más tarde nos enteramos que era un varón y una nena, ¿qué más pedir?, sabíamos que después de tanto sufrir había llegado nuestra recompensa.

Gracias infinitas a GESTAR, porque con la ayuda de ellos nuestro sueño se hizo realidad llegamos a ser padres y de mellizos!!!!

Gracias, muchas gracias a Gestar, a Pía, a Vanina (la bióloga) a todos los médicos y a las chicas de administración, gracias por traer a este mundo a Alma y a Benjamín.

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