¿Biopsia testicular? ¿Punción de epidídimo?

Existen diferentes soluciones cuando no se encuentran espermatozoides en el eyaculado (azoospermia). En la actualidad se pueden obtener espermatozoides para técnicas de reproducción asistida de múltiples modos, mejorado las posibilidades de éxito con una menor agresividad y mejorando la calidad de las muestras obtenidas, en casos en los que antes no era posible. Contar con un urólogo especializado maximiza las opciones para lograrlo en mayor número y calidad.

¿Qué es una biopsia testicular o una punción de epidídimo?. Esta pregunta se la hacen muchas parejas al plantearse un tratamiento de reproducción asistida, cuando el problema es la ausencia de espermatozoides en el semen. El objetivo es obtener el material testicular más adecuado que dé lugar a más éxitos en el tratamiento con el menor daño.

La biopsia testicular es una intervención quirúrgica de entre 15-20 minutos de duración y mediante la cual se obtienen los espermatozoides. Para iniciar se limpia la piel del testículo con una solución antiséptica y se aplica la sedación. Se hace una incisión de 2-3 cm sobre la piel para obtener tejido testicular. En ocasiones se realizan varias tomas (dos o tres de cada testículo de distintas zonas). Finalmente se pone un punto de sutura para cerrar la herida.

El biólogo especializado estudiará las muestras en el momento de su obtención, para poder validarlas y poder solicitar al urólogo la obtención de más o menos material. Normalmente se recuperan suficientes espermatozoides para criopreservar y utilizar en tratamientos de fertilidad posteriores.

Se ha observado que el ADN de los espermatozoides extraídos del testículo tienen un grado de fragmentación significativamente menor, esto se debe a que el material genético de los mismos puede dañarse por oxidación en su camino del testículo al eyaculado.

Hay casos donde puede practicarse la obtención de espermatozoides por medio de una punción de epidídimo. Esta técnica es útil en pacientes con un bloqueo del tracto reproductivo masculino y exige menor destreza quirúrgica por parte del profesional. Sin embargo, la punción es realizada a ciegas y existe la posibilidad de no encontrar espermatozoides.

Lic. Rivelli, Ma. Guillermina